La autoevaluación: un método eficaz de diagnóstico
Una metodología precisa y fiable para la adquisición de competencias digitales
En su papel de medición del progreso del aprendizaje en muchos procesos formativos, la popularidad de la autoevaluación ha aumentado considerablemente. Aplicada como herramienta fundamental del método Ikanos, permite establecer con eficacia el progreso de adquisición de las competencias digitales.La autoevaluación a estudio
La autoevaluación engloba técnicas con las que los que los estudiantes describen y asignan un valor a sus procesos y productos de aprendizaje. (Panadero, E.).En su trabajo “Variability In The Accuracy Of Self-Assessments Among Low, Moderate, And High Performing Students In University Education”, los profesores Samuel Parra León y Antonio Pantoja Vallejo de la Universidad de Jaén y James Byron Nelson de la Universidad del País Vasco analizaron en detalle los aspectos pedagógicos de la autoevaluación. Presentan la autoevaluación como un método integrado, rápido y económico de diagnóstico del progreso formativo que presenta una alta fiabilidad de sus resultados y una validez del proceso de diagnóstico formativo con un alto “grado de acuerdo, acercamiento o consistencia entre las evaluaciones del estudiante y las de sus formadores”.
John A. Ross, en su estudio “La confiabilidad, validez y utilidad de la autoevaluación”, destaca dos características de la autoevaluación: su papel en la autorregulación formativa y fiabilidad.
La autoevaluación forma parte fundamental de un compromiso de autorregulación del estudiante dentro de su proceso de formación. La autorregulación define como “… la capacidad de establecer, monitorear y reflexionar sobre las metas y luego establecer nuevas metas para monitorear y reflexionar”. Se destaca la importancia de proporcionar herramientas y estrategias para un aprendizaje autorregulado. Es en ese entorno donde la autoevaluación obtiene sus mejores resultados.
La autoevaluación se presenta como un método integrado, rápido y económico de diagnóstico del progreso formativo. Consolidarlo como un sistema válido y eficaz exige analizar la fiabilidad de sus resultados.
Se define validez en un proceso de diagnóstico formativo como “el grado de acuerdo, acercamiento o consistencia que existe entre las evaluaciones del estudiante y las de sus formadores”.
John A. Ross revisa en este estudio su fiabilidad, validez y utilidad en educación y destaca algunas elementos relevantes para su implementación efectiva en los procesos formativos, tales como:
- Su fiabilidad como técnica
- Su validez como evidencia del desempeño del estudiante.
- Su naturaleza formativa.
- Su utilidad como técnica de evaluación.
- La fuerte correlación entre los resultados de la autoevaluación y la evaluación del formador.
La autoevaluación en el modelo ikanos
Cuando integramos la autoevaluación en el modelo ikanos para determinar el nivel de competencia digital de los diversos perfiles digitales de las organizaciones, ya compartíamos esas opiniones académicas.De manera proactiva hemos venido experimentando sus beneficios en la mejora de las competencias digitales. Casi 9 años después y tras acumular más de 100.000 respuestas en el test ikanos desde todos los lugares del mundo, valoramos la experiencia como muy exitosa y práctica.
No obstante, la autoevaluación tiene un leve sesgo en cuanto a la medida de la percepción del usuario, no de sus componentes. Compartimos las distintas opiniones sobre la alta fiabilidad de la autoevaluación para el estudiante promedio y la necesidad de un factor de corrección para los extremos. Nuestra propuesta es que los agentes de los procesos de capacitación definan los criterios de evaluación adecuados a los perfiles de todos los estudiantes para eliminar este sesgo.
Te invitamos a que conozcas más acerca del test ikanos, lo uses y nos hagas llegar tus ideas. Tu opinión nos importa.